Acá va la nota que escribieron.
: Computadoras en la frontera
Enviado el Saturday, 01 de December a las 23:20:50 por jornada
Los alumnos de la escuela de la Aldea Atilio Viglione ya estudian con sus notebooks. Jornada estuvo en ese lugar para contarlo.
La Aldea Doctor Atilio Viglione tiene apenas 160 habitantes y su escuela es el orgullo de todos. De allí el año pasado salió elegido el mejor maestro de 2006 y los resultados pedagógicos logrados en todos estos años, hizo que desde el Ministerio de Educación de la Provincia se decidiera a que en la Escuela Nº 97 se realice en Chubut la experiencia piloto del programa "Uno a uno", que significa lograr una computadora por alumno en 92 escuelas del interior provincial. En total habrá5.000 chicos de EGB que no quedarán excluidos de los avances tecnológicos que impone el mundo moderno. La misma experiencia se está realizando en escuelas de Santa Fe, Tucumán, Salta, Mendoza y Misiones.
Primero, el afecto y los buenos modales. Los pequeños aparatos fueron abandonados espontáneamente sobre las mesas desordenadas del aula por la veintena de chicos que con un beso, uno por uno, saludaron al esquipo de este Diario que fue a vivir la experiencia en el lugar. Oscar Pereyra, el director de la Escuela comenzó a contar con orgullo la tremenda novedad educativa, mientras sus alumnos, sin ningún tipo de control, seguían ensimismados en lograr ingresar a la página web de una empresa de la zona dedicada a la inseminación artificial. La información obtenida por los alumnos significará luego una tarea de procesamiento de datos referida a una actividad que los toca muy de cerca: todos son hijos de pequeños minifundistas que tienen en la actividad ganadera la única forma de subsistencia. Antes de la llegada de los pequeños aparatos entregados, el pasado 7 de noviembre, ya todos los chicos tenían los conocimientos básicos de computación. En un segundo plano quedó la sala de computación donde también se encuentra el equipo de radio para el funcionamiento de la FM escolar. "Cuestionar la importancia de la computadora en la educación actual es como haber cuestionado la importancia del libro, siglos atrás", explica Pereyra con claridad. "Lo grave sería que la incorporación de la computadora nos sorprenda sin haber elaborado objetivos pedagógicos claros. Para nosotros es una herramienta importante pero solo una herramienta entre otras. Este aparato y sus posibilidades nos tiene que liberar a través de la educación. Nunca esclavizar. La única forma de exclusión sería precisamente que no sepamos manejar esta herramienta", destaca. Posteriormente mencionó algunos usos desarrollados en estos días. "Me he dado cuenta que los chicos interpretaron inmediatamente a la herramienta. Planteado un objetivo, la utilizan con creatividad, llegando a la misma meta utilizando distintos caminos. La idea es que seleccionen la mejor información".
A las 14.30 en punto, los chicos abandonaron el aparato. Las pequeñas PC quedaron entremezcladas entre las carpetas y cuadernos, como un elemento más. "Estos 20 minutos de recreo son parte del programa: generalmente juegan al fútbol. Las chicas pueden hacerlo aunque no tienen la obligación", explica Pereyra recorriendo los pasillos de la Escuela. En el final de un amplio salón, una decena de chicas ensayan un cuadro musical con el que quieren sorprender al pueblo, el próximo día 12, cuando se festeje el final del ciclo lectivo.
"Antes de la incorporación de las computadoras hicimos un diagnóstico pedagógico de la situación educativa de los chicos. Creemos que el balance final será positivo. En concreto, en estos primeros días podemos decir que estamos en buen camino", expresó.
¿Se trata de un mero anuncio político muy bien promocionado? ¿Los maestros tienen formación previa sobre el tema? ¿El proyecto tiene en cuenta las brechas digitales que pueden existir entre los mismos alumnos? ¿Se tiene la suficiente actitud crítica ante las nuevas tecnologías? ¿Se ha tenido en cuenta el contexto en el que viven los alumnos al momento de decidir que cada uno de ellos tendrá su propia computadora? ¿No se corre el riesgo que la tecnología reemplace a la cultura del esfuerzo? ¿Puede la tecnología estar por encima de la pedagogía? ¿Tienen los alumnos capacidad de valorar y discriminar la información? ¿Diferencian la información fidedigna de la pornografía intelectual?
Todas estas preguntas machacaban con insistencia mientras se ascendía desde la Meseta a la Cordillera, por polvorientos caminos, hasta llegar hasta apenas una pocos kilómetros antes de la frontera con Chile.#
